martes, 18 de enero de 2011

Viña: Desgarradores relatos de dos profesoras que denuncian torturas por parte de Corporación

Desde hace un tiempo he conocido lo que es sufrir el mobbing laboral. Ese que se practica generalmente por lo bajo, que al principio se cree que se trata sólo de desentendimientos y roces en la adaptación a una nueva jefatura. Cuando esto ocurre en forma sistemática, se es una persona consecuente con sus principios éticos y, no se transa cuando se trata de poner en juego la verdad, la justicia y la dignidad, la vida se va tornando muy difícil, la salud física y psíquica se va debilitando.
Cuando se recurre a las instancias que nos deberían proteger como trabajadores, me refiero al Colegio de Profesores, o a la Inspección del trabajo y, sólo queda la certeza de la indefensión y la indiferencia, para quien depende de ese trabajo, los deseos de vivir comienzan a apagarse. Es la experiencia de estar topando fondo en la depresión.
Es el deencanto de haber construido con mucho entusiasmo y cariño la carrera profesional que nos ha mandado la vocación y, que personas que no te quieren en tu lugar de trabajo porque tus principios éticos les resultan molestos, te han ido minando lenta, casi imperceptiblemente, indirectamente, pero en forma sistemática.
Quienes nos dedicamos a la filosofía, sabemos que ser consecuentes con los principios primordiales vale más que la vida. Y, en la impotencia por la soledad en la lucha, se hace factible protestar entregando la vida a cambio del honor. Es lo que sentí y pensé en los momentos más oscuros de este tiempo.
Conversé sobre esta decisión con mi hijo, y me pidió que buscáramos otros medios de lucha.
Y me di cuenta que debía seguir adelante, con el apoyo de médicos, familiares y algunos amigos cercanos.
Ahora estoy en acciones legales extremas.
Un medio periodístico nos entrevistó a mí y a otra profesora que pasa una situación semejante, a quien hoy despidieron de la Corporación Municipal de Viña, por seguir este tipo de acciones.
Tal vez ocurra lo mismo conmigo, pero le prometí a mi hijo seguir adelante.
Les cuento esto porque creo que hay que erradicar el mobbing de los trabajos y todos podemos aportar en algo si tenemos conciencia de la necesidad de respeto por la dignidad del ser humano, y expresarles que, a riesgo de todo, he decidido ser fiel a mí misma.
Pongo aquí el link de la conversación que tuvimos la otra profesora y yo, con un medio de comunicación que cubre nuestras historias.

http://comentaristaurbano.bligoo.cl/content/view/1280458/Vina-Desgarradores-relatos-de-dos-profesoras-que-denuncian-torturas-por-parte-de-Corporacion.html#content-top


Con afecto
María Elena













Ambas reconocieron que han pensado con terminar con sus vidas debido a todo lo que han sufrido."

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Comentarista Urbano tuvo acceso en las últimas horas a entrevistar a dos profesoras de la Corporación Municipal de Educación de Viña del Mar que denuncian ser víctimas de torturas sicológicas y acoso laboral por parte de sus empleadores, caso que ha sido informado ampliamente en este portal.
 
Se trata de los testimonios de Luz Penroz y María Elena Melgarejo, quienes son representadas por el procurador judicial Javier Gómez, el que explicó que siguen adelante con las querellas en contra de quienes resulten responsables de éstas y otra serie de irregularidades que denuncian existen en la Corporación.
 
Los relatos de ambas docentes son dramáticos. Admiten que han pensado en autoeliminarse debido a la situación que han sufrido. Dicen que han sido vìctimas de una persecución y acoso sin límites, lo que les ha impactado fuertemente en sus estados de salud, por lo que están con licencias médicas siquiátricas.
 
Coincidieron en que dan estas entrevistas como una forma de denunciar públicamente estos casos y evitar que se sigan cometiendo estos atropellos. Ambas coinciden en que éstas son prácticas habituales en contra de quienes no son "favoritos" de las respectivas jefaturas. También reconocen que son varios más los docentes que viven estas situaciones, los que, según ellas, no se atreven a denunciar estos casos por miedo a perder sus trabajos o a sufrir represalias por parte de directivos.
 
En esta nota, los videos respectivos sobre estos casos.

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